SINOPSIS
El día 27 de Noviembre hicimos la segunda etapa "CÁPARRA - CRUCE DE HERVÁS" 26,4 Km. Ante todo dar la bienvenida a los nuevos integrantes del grupo:
Mercedes Sánchez
Inmaculada Pascual
Miguel Carrasco (poco a poco el grupo va aumentando)
La suerte nos acompaña desde primera hora con una temperatura, una luz, una vegetación y una fauna que nos impresiona a todos aquellos que a pesar de verlo muy a menudo, no dejamos de maravillarnos de la zona tan preciosa en la que nos encontramos.
El viaje está resultando didáctico ya que vamos comentando los distintos tipos de setas encontradas, las grullas, los milanos, las distintas clases de vacas, los alcornoques con el descorche realizado en el último verano, etc.
La etapa no resulta complicada, a pesar de los niños, los cuales se adaptan al recorrido con una entereza encomiable. La previsión era terminar en Baños de Montemayor, pero dado que el tiempo apremiaba para realizar la vuelta en autobús, decidimos terminarla a 7 km. de la localidad, tomando la decisión de continuar la próxima etapa desde este punto.
Como comentario de la etapa hay que reseñar que los dos arroyos que hay que sortear no están excesivamente preparados para realizar un vado sin correr peligro de acabar en el agua. También hay una pequeña confusión con lo escrito en otras páginas en lo referente a una zona antes de llegar a Aldeanueva del Camino. Recomiendo seguir las indicaciones existentes en las señales, ya que a pesar de dar un pequeño rodeo, merece la pena el paisaje por el que se atraviesa.
Terminamos la jornada con una comida de hermandad en Plasencia con las esperanzadas esposas que de momento no se han podido unir al grupo y que con tanta devoción nos apoyan en nuestra encomienda. Tras la oración de rigor nos despedimos hasta LA PRÓXIMA!!!!!!!!!!!!!!!!!
DESCRIPCIÓN DETALLADA (Obra de Javier Vivas)
Dejando el arco de Caparra a la espalda y con una mención especial a los Escipiones, y que el Pelegrino Sanchez se reía cada vez que pronunciaba Escipiones, apellido romano usado por una rama de la familia de los Cornelios, y que encabezando el clan Publio Cornelio Escipión, tribuno militar con poderes consulares, allá por los años 395 a. C. donde hicieron de la suya en esta Hispania nuestra, y que un hijo de éste, Publio Cornelio Escipión el Africano, afortunadamente derrotó a Aníbal el Bárbaro, y que bajo de mi punto de vista, teníamos que estar más que agradecido y festejarlo como fiesta nacional un día al año.
Pues es aquí, donde se hilvana la 2ª etapa, continuamos en dirección a Aldeanueva del Camino cruzando la carretera situada a la salida Cáparra, ciudad extremeña que data de la época prerromana, encontrándonos al frente un mojón verde-amarillo que nos indica la dirección a seguir, por un estrecho camino entre paredes de piedra y un espectacular túnel formado follaje de monte bajo frondoso y tupido, escoltado de encinas tanto a izquierda como a derecha de la dehesa Venta Quemada y que este sendero nos dura con estas características unos un par de Km.. Al final de éste, una cancela es punto de inicio de un sendero mucho más ancho y amplio.
Atravesada esta cancela recorremos 2,5 Km. hasta llegar a un hito H3, que por cierto, no habla de nada porque no tiene nada que leer, por falta de documento. Cruzando otras dos cancelas, nos encontramos con el primer arroyo, donde ya nos empiezan a dar guerra lo poco cuidado y lo mal colocado que tienen situadas la piedras para su paso, donde nuestro “Pelegrino” Nacho e imitando al “Pelegrino” Mayo se nos mete hasta la ingle en el arroyo.
Incidente sin importancia. Se recolectan calcetines incluso de colores diferentes y problema resuelto. A 1,5 Km. nos encontramos con otro arroyo, que más que arroyo es un río, y éste, no es que esté cuidado, es que se han olvidado de él (o bien han pasado de él). Te descalzas y te remangas a riesgo de que la corriente te lleve al Atlántico o no le pasas, por más que bordeamos no encontramos la manera de pasar. Decidimos acarrear y arrastrar piedras hasta conseguir hacer un triste y afligido pasadero, para que con mucha pericia y arresto poder pasar con cierta y mucha dificultad. Lo que no podíamos consentir es que el “Pelegrino Nacho”, el más brillante de la etapa, sin duda alguna y con permiso de Mayo, se volviera a mojar, en fin, una catástrofe y pérdida de tiempo la que nos sometió este acaudalado y profundo arroyo, y todo esto agradecido a la desidia e incompetencia a que le corresponda velar por el cuido y custodia de esta ruta.(Tomen nota de esta insidia y falta de celo al que le corresponda, de estas formas, no hacemos patria y mucho menos camino.
Desde este H3 y entre encinares, 1 Km. después el camino indicado por hito y sin poder descifrar lo que decía por lo mismo que el arroyo, por falta de interés y diligencia del buen trabajo por parte de sus cuidadores, y tras pasar una alambrada para comenzar a transcurrir por la carretera asfaltada perteneciente a la Zona Regable del Ambroz , que nos llevará unos 5 Km. más adelante hasta la intersección con la carretera de La Granja.
Y a escasos metros de una rotonda de incorporación a la N-630, ¡Alarma!, ¡Parada en seco de todos los peregrinos!, ¡Caras desencajadas!, ¡Ojos llorosos!, y mucha, pero que mucha preocupación. Mayo, este duro e intrépido animal cojea. Se trata de una cojera de ladeo inclinado rozando el vencimiento de sus 40 kilos al firme de duro suelo asfaltado.
Isabel, en un acto de aplomo y reflejo de mujer del cuerpo de veterinarios, se hace cargo de la situación, le coge la pata a Mayo, y en primera vista ocular, detesta que lo que le aflige y le inclina a Mayo es un espino como alrededor de 12, 75 Mm. que con pericia y laboriosidad consigue sacar sin dolor o causa negativa para Mayo, y éste agradecido, corre que se las pela, ¡Otro contratiempo resultó en esta 2ª etapa y gracias a Isabel y su valentía. Vamos Isabel de Aragón!
A nuestro paso cruzamos por la carretera comarcal de Zarza de Granadilla y seguimos la margen izquierda de la N-630 y observado un hito verde como de chapa y como mal colocado el primero que vemos así, siempre ha sido de granitos, y nos indicaba trazado de la calzada romana, y que brilla por su ausencia, caminamos en lo posible por los márgenes de esta carretera para ir mas seguros porque ni calzada ni nada que se le pareciera.
Unos metros después el camino gira a la derecha, y vemos un arroyo, este sí que no pasamos ni con zancos, me gustaría saber quién es el responsable de esta etapa, para comentarle lo mal que la tienen. Subimos a la N-630 y mientras que el trazado de la calzada pasa por un viaducto debajo de autovía, nosotros andamos por la N-630 siguiendo un señales de tráfico que indicaba que es ruta de peregrinos, y nos sube hasta el cruce con la carretera comarcal de La Granja.
Desde este cruce, nos pasamos al margen derecho N-630, caminamos dirección a Aldeanueva del Camino hasta que a la derecha de esta nacional nos dirige a un camino de tierra en zahorra de pizarra he indicado por un hito amarillo. Después de andar un metros giramos a la izquierda , craso error, entrada a una finca. Tenemos dudas e incertidumbres, ya lo decía Chema, hay que saltar pardos y paredes como a lo Rumbo. Seguimos andando y sigue nuestra incertidumbre.
Me pongo algo nervioso y si me dejan los demás Hermanos" Pelegrinos" los hago atrochar, saltando paredes, alambradas, etc. hasta llegar al trazado de la antigua calzada romana, donde colocamos el mantel de cuadro y nos dimos un homenaje de once como manda Dios que tienen que ser la once. Este recorrido es impresionante, nos llevará entre alcornocales enormes y formidables en su tamaño y envergadura y encinares a las inmediaciones de Aldeanueva. Pasamos un arroyo con una pasarela muy digna, también hay que decirlo.
Tras subir un tramo de calzada romana en buen estado nos encontraremos con un cruce de caminos donde un hito verde marcará al frente y otro amarillo nos indica que debemos cruzar la autovía por un viaducto para volver a caminar sobre el trazado de la antigua N-630 que nos llevará hasta el cartel de entrada a Aldeanueva, que no cogimos afortunadamente, ya que se decide ir de frente paralelo a la autovía hasta el viaducto Gargantilla y Segura de Toro al que empleamos un gran gasto y superfluo esfuerzo en subir un corto y sublime terraplén con un porcentaje inclinado en pendiente de 80º. Una vez arriba y afogonado (como dice Chema), como no podía ser de otra forma, dudamos entre entrar en Aldeanueva o seguir la VP paralela a la autovía, pero el raciocinio y la visión espacial del “Pelegrino Mayor “ nos hace tomar esta segunda opción y en la que un cartel de la autovía anuncia 1500 m para el cruce de Hervías. Tengo que decir que fueron los 1500 m. más largo de mi vida, coño si parecían 5000 m.
Ya en la rotonda de del cruce de Hervas y siguiendo la N-630 a la derecha y cruzando al margen izquierdo, pasamos al famoso y romano Puente Romanillo, y que no sé el significado que tienen todo ese Acero Corten a modo de pasamano y pasarela Ajuar en Acero Cointra a modo de decoración en lo alto del puente, como si éste se tuviera que engalanar con cualquier otra cosa que no fuera su propia roca granítica y más con la talla y finura que ejerce este Romanillo a la garganta de San Andrés. En fin, otra cosa más de estos iluminados y vanguardistas lapidadores del dinero público. Claro, como no es suyo.
Quitando la dejadez y la desidia de los encargado de velar por esta ruta, tengo que decir, que muy bonitas vistas, y si en algún momento fue fea, que no fue el caso, lo suplió toda esa sierra del Ambroz y sus colores otoñales.
Etapa punteada ……………….
VINO DE LA ETAPA. (Obra de Chema Torres).
El vino de la etapa ha sido un HUNO MATANEGRA 2007.
A estas alturas de la etapa se agradece la cata de este vino aportado por el "Pelegrino" Chema, el cual nos alienta para concluir con éxito el destino tan añorado.
CATA DEL CIGARRO DE LA JORNADA ( Obra de Javier Vivas).
2ª Etapa, Caparra a Puente Romanillo en Ruta la Plata a Santiago de Compostela.
Este cigarro es de la Marca Bolívar y repito con una Mareva, que como dijimos, es Vitola de Galera y como Vitola de Salida, Petit Corona nombre comercial.
El tamaño del cigarro es de 12,7 cm. de diámetro 1,7 cm. y con un peso de 8 g.
Este cigarro tiene un aspecto superior, el color a saya Franciscana, tiene unas leves e inapreciables venas, al tacto en toda su amplitud está bien prensado pero no prieto.
Con el sacabocado le hago un corte cilíndrico de 7 mm., y que es más que suficiente para disfrutar en frio, el cual desprende un gusto a terroso, potente y ligeramente especiado y la fragancia que desprende al pie de cigarro es a tabaco puro, complejo y consistente.
El encendido de este Petit Coran es ligero y generoso, no necesita mucho tiempo el golpe de fuego de trillama, me deja una orla de brasa completa y bonita.
Los primeros humos ya manifiestan un cigarro de cuerpo importante, rico, y un recuerdo a infusión de manzanilla, lo mismo l que desprende el total de los 49 hermanos que descansan en la caja.
En los primeros, el humo que genera en boca es lo apropiado pero regularmente lento, especiado, cremoso y de pos gusto muy dulce a fruta madura, y de fortaleza importante, potente cigarro redondo y muy equilibrado.
La ceniza dice mucho de este cigarro, gris acero y bien prensada, un cigarro muy bien manufacturado, quema parejo y lento, como me gustan que tiren el cigarros, sin prisa y si es bueno mejor, y cuanto más despacio el fumaje mejor.
En paseo por nariz es apoteósico, cuero, cafetero y vuelve la manzanilla, este cigarros es soberbio.
En los segundo, se trasforma lo especiado en terroso, cremoso, dulzón y un fuerte gusto a tostado, la fortaleza se acentúa, es curioso este cigarro, lo tiene todo, es nervioso y sosegado a la vez, es un cigarro con un equilibrio perfecto e inusual en las marevas, tiene 5 años esta criatura de vida, pero que cinco años más bien aprovechado.
A pesar de estar fumando este cigarro en el campo, me está dando una fumada bestial, fumar este cigarro y en mi Smoking Córner y disfrutar del todo el humo que desprende seria el nova mas de las fumadas, tengo que decir que este domingo día 27 fue un día espectacular, tanto de sol como en temperatura y que fumado en las laderas de Valle de Ambroz y sus colores otoñales, bien vale una misa, u dos.
En el tercero sigue en su línea temperamental, potente, complejo, untuoso cremoso, terroso, especiado y sigue en su línea de dulcedumbre, que ligado con la fortaleza que tiene hace de este un portento de cigarro, bien creo que este cigarro no está acto para fumadores noveles, por su complejidad, pero recomiendo que lo fuméis.
